Un dia de diversión(Aline)

Días estresantes habían sido aquellos, las clases no me dejaban respirar, los profesores se ponían mas quisquillosos con los trabajos encargados, las 24 horas del día parecían no ser suficientes para todo lo que "debía" hacer. Por suerte, la semana había acabado y ahora solo quedaba aprovechar al máximo los días de tranquilidad que me quedaban. Mi filosofía de vida no podía faltar en esos casos, debido a ello lo importante era sacarle el jugo al fin de semana en lugar de quejarme de lo difícil y asfixiante que había sido. Aunque, por alguna razón, no me apetecía salir a ningún lado... algo que no ocurría a menudo. Tal vez lo mejor sería rentar una película de terror y quedarme viéndola comiendo palomitas de maíz acompañada tan solo con una coca-cola helada, sí, eso sonaba perfecto en verdad.

Me disponía a ponerme cómoda recostada en el mueble de mi departamento, cuando de pronto sonó el móvil, tomándome por sorpresa pues no esperaba ninguna llamada, ese día en especial no me vería con nadie, no con nadie que recordara al menos. Observe el teléfono con curiosidad unos segundos antes de acercármela al oído. Era una compañera de clase, recordándome que le había prometido salir con ella. – Ya voy. – le dije con un tono resignado, anotando la dirección en un papel cualquiera. Una promesa era una promesa, independientemente de si tenía ganas o no.

Sin pensarlo dos veces me metí a la ducha, no me gustaba arreglarme demasiado antes de salir, pero no iría al club con el cabello oliendo a papitas fritas. Por suerte, el agua caliente me ayudo a relajar los músculos, llenándome de animo que antes no poseía. Estaba decidida, esa noche me divertiría así tuviera que bailar sola toda la noche. Me vestí con unos jeans ajustados y una camiseta oscura, bastante simple en realidad, pero al menos ayudaba a verme mas alta de lo que era en verdad. Un poco de perfume y estaba lista para salir.

Llegue al lugar en un abrir y cerrar de ojos. Tenía buena pinta, a demás, estaba lleno de personas dispuestas a divertirse. ¿Que mas se podía pedir? Ingrese sin problema alguno, sin identificación y sin formar una fila. Anduve buscando por todos lados a mi amiga, aunque fue en vano pues no evidentemente no se encontraba en ningún lado. Tenía dos posibilidades: O ella no había llegado aun, o ya se había ido con un tipo que conoció por ahí... aunque lo último sería algo típico en ella. Suspire. En fin, ya me encontraba en ese club, lo mínimo que podía hacer era aprovecharlo. Camine hasta la pista de baile y comencé a balancear las caderas al ritmo de la música. Estaba bailando sola, lo que causaba miradas curiosas, aunque no me importaba demasiado.

Me gire enseguida cuando sentí la presencia del Barman y este tocio un poco para que entrara en si, llevaba mi copa en su mano y la había acercado hacia enfrente dirigiéndola a mi así que solo tuve que estirar un poco la mano para tomarla y agradecerle con un ademan con la otra mano para darle un sorbo lento a mi bebida, como si fuera a probar que el chico hacia buenas bebidas, y sorprendente mente era cierto estaba increíble.

Le di otro buen trago aunque no demasiado ya que no quería comenzar a marearme a los primeros diez minutos que estaba en ese lugar, me gire como un chiquillo en el taburete y mire a las personas que bailaban en la pista para después observar a unas chicas que susurraban cosas entre si mirándome y no era tan agradable, si pretendían que iba a acercarme a ellas bueno estaban algo equivocadas.

Le di otro trago a mi vaso y acomode mi chaqueta en la silla encargandosela al barman para después armarme de valor e ir hacia la pista de baile...solo, era extraño pero no me había llamado la atención alguien desde que entre.
Comencé a mezclarme entre las personas siguiendo el ritmo de la música cuando encontre a una chica que al parecer bailaba sola al igual que yo, así que no perdí oportunidad y me acerque a ella por detrás.
Puedo ser tu pareja de baile...prometo no pisarte-le dije sobre su oído para que me escuchara.

Seguía bailando al ritmo algo ida, con pasos descoordinados puesto que no ponía especial cuidado en realizarlos bien. Me quede mirando al suelo un instante, preguntándome que hubiera sido si me hubiera quedado en casa, tal vez no estaría viendo ninguna película de terror si no que me encontraría aprovechando al máximo los últimos capítulos que quedaban de Dr. House, riendo y... ¿aprendiendo? De su sarcasmo. ¿Quien sabe? Tal vez sus conocimientos me sean útiles en alguna oportunidad. Aunque ese tema no venia al caso, no estaba segura de porque lo traía a colación.

Estaba tan sumida en la música, en mis pensamientos extraños, en el movimiento de los demás y en el mio propio, que a penas fui consciente de que alguien se acercaba hacia mi, incluso hubiera creído que las palabras estaban dirigidas para alguien más, de no ser porque resonaron en mi oído de un momento a otro. Me gire para ver de donde provenía la voz y me encontré con un chico bastante alto, de tez morena, para mi sorpresa, era bastante apuesto. Eleve una ceja inconscientemente, solía hacerlo cuando me encontraba examinando algo con cuidado. La pregunta era, ¿lo examinaba a él? ¿O a la situación en la que me encontraba? No estaba segura del todo. En caso de ser ambos, no tenía nada que perder. Claro, a menos que el chico fuera una especie de asesino a sueldo o un ex-convicto. Vale, mi imaginación estaba tomando rienda suelta. Quite esos pensamientos de mi mente y reí con su comentario. – A menos que yo te pise primero. – le dije divertida y lo señale con la barbilla, aun con la sonrisa pintada en el rostro. – Dale, muéstrame tu mejor movimiento.

Empece a dar saltos, moviéndome con energía de un lado a otro, tropezando de vez en cuando con las personas que se encontraban al rededor. Si, es la única palabra con la que se puede describir mis pasos de baile pues no eran precisamente los mejores, eran simplemente "entusiastas". Aunque no interesaba realmente ya que mi intención era otra, si es que él lograba descubrirla. Sonreí y me acerque para que pudiera escucharme por sobre la música. – ¿También estas solo? – le pregunte. Antes de darme cuenta ya había pronunciado el "también", dándole a entender que al menos yo lo estaba. Rayos.

La chica parecia simpatica y por primera vez me sentí bien de haberme quitado la flojera de encima y venido a este lugar, porque a decir verdad el colegio era un tanto aburrido y si estaba en un club o algo asi pero los chicos y chicas que había conocido ahí aun no terminaban de llamarme la atención como para reunirme con ellos.
Escuche lo que dijo y no pude evitar sonreir aunque seguro no lo veria muy bien porque las luces del club permanecían apagadas y estaríamos a oscuras de no ser por las lucecillas de colores que emanaban de unas maquinas supongo eso lo hacían para que el lugar se viera mejor.

No te preocupes soporto bien los pisotones-le dije con una sonrisa para que no se preocupara de ello, tampoco yo era el gran bailarin del lugar que digamos pero tampoco era malísimo, menciono lo segundo y comencé a moverme a su ritmo aunque aun no lo descubrir muy bien, parecía que la chica se movia como fuera y solo pensaba en divertirse, eso me agradaba a un mas.

Cuando se acerco rodee su cintura para escuchar claramente lo que me decía, menciono que si tambien estaba solo asi que supuse ella no venia con nadie y pensándolo bien ahora entendía el porque estaba en medio de la pista bailando sola.
“Tambien” vengo solo-le dije recalcando el tambien para que supiera que había entendido que ella estaba sola en este sitio.
Seguimos Bailando durante un rato hasta que cambiaron de genero de música y pare de bailar acercándome a ella de nuevo.

Quieres tomar algo…invito-le propuse ya parando de bailar y mirándola, la verdad todo este baile me había dado demasiada sed y al verla a ella mas detalladamente tambien se veía no cansada si no agitada por el baile, asi que nos vendría bien.