La fierecilla domada || June

Me quedaba una hora hasta que empezaba mi proximo curso de historia de la literatura. Para eso tenia que leer una obra de teatro de Shakespeare en original, en ingles vieja. Como ya lei las obras mas conocidas, decidi buscar alguna que no lei antes. "The Taming of the Shrew" fue la obra que elegi. Me sente en un sillon, me saque las gafas, que portaba cuando tenia que leer, de la mochilla y me hice comoda.

-I'm screwd.. dije en voz muy baja para mi. Acaba de empezar leerla y me sentia como si estaba leyendo en alguna lengua asiatica.

Había decidido ir a al biblioteca a estudiar un rato derecho penal. Era una asignatura que me parecía interesante pero sin duda era complicada. En esos momentos valoraba más que nunca mi gran memoria, sin ella ya me habría vuelto loca con solo ver el grosor de mis libros.
Caminé con tranquilidad hasta ese santuario lleno de libros y gente estudiando. Llevaba poco en la universidad pero aún no había pasado un día en el que no hubiese ido allí a estudiar. Era el lugar en el que mejor me concentraba, ya que no me distraía como me podía pasar en mi cuarto. Entré al lugar con paso firme y me maravillé por la cantidad de libros, aún no me acostumbraba a la visión de todos esos libros. Tal vez un día debería leer algo diferente que no tuviese nada que ver con derecho.

Me senté en uno de los sillones, ya que solamente iba a leer, por lo que no necesitaba ninguna mesa. Cerca de mí había una chica, no pude evitar fijarme en el libro que estaba leyendo. Era una de mis obras favoritas de Shakespeare, la había leído durante ese verano tras la insistencia de mi abuela - Buena obra - susurré, lo suficientemente alto para que ella me oyese pero con un tono que no molestase a la gente que estaba estudiando.

Estaba al punto de renunciar cuando escuche una voz al lado mio hablando. No estaba segura si me hablaba a mi o a otra persona, así que mire por todas partes para asegurarme. Al ver que yo estaba la persona sentada mas cerca de ella, la mire dedicándole una sonrisa amable. Afirmo que lo que yo estaba leyendo es una buen obra, lo que significaba que la leyó. -¿Si? la pregunte curiosa. - Yo tengo que reconocer que no entiendo nada de nada.. continué soltando una risa divertida, olvidandome que estábamos en una biblioteca hasta que unas caras enfurruñadas me miraron. Cosa que me daba ganas de reír mas fuerte. -Perdon.. me disculpe poniendo una cara avergonzada.
-Creo que sera mejor idea tratar de leerla en español primero.. añadí volviendo a mirar la chica rubia que estaba sentada en el sillón al lado mio.

Sonreí al ver que la chica miraba para todos lados, como intentando saber si le hablaba a ella. La miré y sonreí - Yo me la leí este verano y me encantó - dije en un tono algo bajo. Conocía a la gente que iba a la biblioteca y eran muy quisquillosos con los ruidos. La chica rió, no pude evitar sonreír divertida por lo que había dicho y como yo había imaginado más de uno la miró mal. Lo cierto es que la gente era un poco exagerada - Es una obra que necesita tiempo, tienes que leerla despacio - dije sabiendo de lo que hablaba. Cuando empecé a leerla no podía leer muchas páginas seguidas pero al final me encantó y conseguí leer con más fluidez.

La miré cuando dijo lo del español - Si así lo vas a entender mejor hazlo porque si no te va a costar mucho - le aconsejé. Me incliné levemente hacia ella - Por cierto soy June, también puedes llamarme JJ o Jen, lo que prefieras - me presenté sonriendo con amabilidad. Casi siempre que hablaba con alguien, por poco que fuera no podía evitar decirle mi nombre. Tal vez resultase extraño pero yo era así.

Exactamente como pensaba, la chica la leyó. La mire con interés cuando me hablaba. Nunca fui la persona que hizo lo que los otros la aconsejaron, al contrario, pero eso no significaba que no escuchaba los consejos de los otros. Me gustaba escucharles, pero no siempre ponerlos en practica. Aunque, lo que ella hacia, no era precisamente darme un consejo, si no afirmaba, lo que yo misma dije unos momentos antes, así que probablemente la iba a escuchar. -Si, eso mismo eslo que voy a hacer dije dedicándole una sonrisa amable. Cerré el libo, me quite las gafas y les puse en la mesa de al lado. -Pero, mas tarde. susurre en un tono divertido.

-Ah, JJ! exclame, olvidandome de nuevo que estábamos en una biblioteca. Bueno, tenia que reconocer que para mi siempre fue y siempre sera muy difícil hablar bajito. Me gustaba hablar en voz normal o fuerte, me gustaba hablar mucho.. No pocas fueron las veces cuando se me olvidaba callarme. -Ups.. susurré agachándome la cabeza al darme cuenta que la gente volvió a mirarme. Me arregle la voz y mire a June. -así que ¿naciste en Junio? ¿o es una simple coincidencia ? la pregunte en voz baja. Por cierto, yo soy Tris, pero llámame.. Tris continué divertida. -Es que, nunca nadie me puso algún apodo ni nada. Tris.. que aburrido añadí divertida. Ya empezaba a hablar mas de lo que debería, como siempre.

Le correspondí la sonrisa. Mientras jugueteaba con mi libro, si estaba sentada tenía que tener algo entre mis manos para entretenerme, un boli, un libro... lo fuese. A mucha gente eso le ponía nerviosa pero a mí no me importaba, si tenía que pensar en lo que ponía de los nervios a los demás no podría ser yo misma.

No pude evitar reír, aunque algo flojito, al oír su exclamación y como la gente la miraba mal. Miré a esas personas y les saqué la lengua como diciéndoles que se fastidiaran - Son unos amargados - le dije a la chica mientras le sonreía divertida.
Sonreí por lo que dijo de mi nombre - No, nací en Julio - respondí, en mi tono de voz se podía notar que esa pregunta me había hecho gracia. Siempre desde que había sido niña la gente había hecho la gracia de mi nombre con el mes, por eso cuando entré en el instituto una de mis mejores amigas me empezó a llamar JJ, y así es como comenzaron a conocerme todos. Sonreí de nuevo cuando dijo su nombre - Tris no es aburrido, es un nombre bastante original, yo es la primera vez que conozco a alguien con ese nombre - le dije sonriendo. Y eso era cierto, era la primera vez en mi vida que conocía a una chica con ese nombre.

Al ver el gesto de JJ, cuando les saco la lengua a los que me miraban mal, sonreí agradecida. -¿Verdad? No se como pueden ser tan amargos a esta edad.. dije poniéndome los ojos en blanco, para luego sonreiré divertida. Esta chica me caía muy bien.

Note la gracia en su voz cuando dijo que nació en Julio. Seguramente muchas personas la había preguntado lo mismo que yo y para ella ya era una rutina responder a esa pregunta. Le sonreí y empecé a tararear en voz muy baja la canción de Beatles. Hey June.. don't be make it bad. Take a sad song and make it.. Me pare y sonrei avergonzada y divertida en el mismo tiempo. -No, espera.. eso fue Jude! dije poniendo una cara de "oops, I did it again!" -Pero con June suena mejor.

-¿En serio? Pero seguramente escuchaste el nombre Tristan. afirme divertida-Cuando estaba embarazada, mi madre estaba leyendo "Tristan e Isolda", por eso me puso el nombre Tris, que por cierto, viene de "tristis" que significa triste. Y la ironía es.. que yo soy una persona muy alegre. le conté muy divertida. -La persona alegre con un nombre triste. añadí sonriendo irónicamente y mostrando con los dedos índice hacia mi. -Mi madre no fue muy inspirada continué soltando una risa subtil.[/color]
La mire medio sonriendo. Seguramente ya se cansaba de escucharme hablar tanto, además suponía que había venido a la biblioteca para estudiar y yo le contaba el origen de mi nombre. -Bueno, ya me callo.

Sonreí cuando confirmó lo de que eran unos amargados - Hay mucha gente que ya es vieja aún siendo joven - comenté. Yo me había encontrado con muchas personas que eran así, gente que no sabía organizarse para hacer todo lo que tenía que hacer y además divertirse. Esas personas me ponían nerviosa porque encima cuando la gente se divertía decían que eran unos irresponsables.

Solté una pequeña risa cuando tarareó esa canción. Y ahí estaban otra vez esa gente mirándonos mal, los miré y les sonreí divertida. Tampoco estábamos haciendo tanto ruido. Sonreí a Tris, me hacía mucha gracia sus comentarios, sin duda esa chica ya me caía bien.

Escuché cuando me contó la historia de su nombre - Se nota que eres una chica alegre - dije sonriendo - No hace falta que te calles, prefiero hablar contigo que leer este libro - dije cogiendo mi libro - Bueno al menos tú tienes un origen de tu nombre a mí me pusieron June porque así se llama mi abuela materna, no fueron muy originales la verdad - comenté para mostrarle que no me importaba hablar aunque fuese de nuestro nombres - Creo que somos parecidas en eso de hablar mucho - le comenté. Lo cierto era que yo era una persona con mucha conversación y era algo difícil callarme. Y por lo que había visto a esa chica le pasaba lo mismo.

Asentí con la cabeza dejándola saber que estaba perfectamente de acuerdo con ella. Estaba muy alegre que encontré a alguien que pensaba mas o menos como yo, que se parecía un poco a mi porque la mayoría de mis amigos son totalmente distintos. No es malo, porque se dice que los polos opuestos se atraen, pero aveces se siente muy bien tener una conversacion con alguien que te entiende.

-Bueno, si pienso mejor, June también significa algo. dije poniendo cara pensativa y solté una risita divertida. -No, en serio. El mes, June o Junio, tomo su nombre de la diosa Juno, que también es llamada Hera por los griegos. continué y las comisuras de mis labios formaron una sonrisa. Como yo nací en Grecia, siempre me apasionaron las leyendas griegas, las historias de los nombres y todas esas cosas parecidas. -Así que, tu nombre es bastante original. Es un nombre de diosa.

Me eché el pelo hacia atrás y le sonreí cuando dijo que mi nombre sí que significaba algo. La escuché con algo de curiosidad cuando nombró el origen de mi nombre. Siempre me había gustado la historia pero nunca le había prestado demasiada atención a la mitología, tal vez hubiese leído algo sobre la griega y me había parecido interesante pero no había leído una historia para saber que había una diosa llamada Hera - Mira ya puedo contar esa historia la próxima vez que hable con alguien sobre mi nombre o cuando me presente - dije sonriendo, se notaba que me estaba divirtiendo. - Si ya sabía yo que era una diosa - dije echándome el pelo hacia un lado y fingiendo ser una creída. Podría haber sido convincente pero no pude evitar soltar una leve carcajada. Entonces volví a notar todas esas miradas puestas en nosotras - ¿Cuánto crees que tardarán en echarnos de aquí? - le pregunté divertida mientras miraba de reojo a la gente que nos dirigía mirada de exasperación, no dudé en sonreír hacia su dirección y guiñarles un ojo.