playa, tragos y Luci

por Invitado Vie Jul 06, 2012 10:13 pm

No se trataba de aquella persona con el mayor afán de bañarse en público y mostrarse o cualquier tontería que hacían los nenes de la playa, yo la prefería para relajarme así como era en las muchas veces que salía por trabajo al extranjero aprovechaba estas instancias para tomar unas gafas de sol, una toalla y un trago, no había mejor panorama.

Salió de casa tras terminar un par de fotografías, y se encamino hasta la zona más caliente de la ciudad. Una vez en el lugar se sentó en una de las sillas libres a un lado del bar le pidió el periódico a uno de las chicas guapas que atienden y uno de esos tragos imitación del Caribe que tienen esos sombreritos graciosos. La playa en solitario definitivamente era un asco así que nada mas pudo visualizar la inconfundible cabellera pelirroja de Lucy sonrió y levantó la mano para saludar y llamar la atencion de la chica

-eh!, pecosa-

por Invitado Vie Jul 06, 2012 10:33 pm

Era viernes por la noche y no quería pasar mis días encerrada en una habitación estudiando, hoy sería MI DÍA, hoy sabía que G O S A R I A, pero no encontro sus amados porros, al parecer, se los había tragado todos de golosa, suspiró, ¿Ahora que haría?. Si no fuera que entre sus cosas encontro un bañador, no se le hubiera ocurrido ir a la playa, por ende, tomo un bolso el cual lleno con cosas indespensables. Estaba ya duchada, por ende solo fue cuestión de colocarse el bañador sobre su piel desnuda sobre una camisa de cuadros a su medida pequeña rojos y negros, con unos shorts pequeños de jeans, tomo unaz zapatillas y salió del lugar. Tomo un taxi que la llevara a cualquier playa, la dejo en una cercana, donde se podía visualizar el mar de manera extraordinaria.

Tome una de las sillas desocupadas, me senté en ella, era verde oscura esta, con bases de madera. En esta me fui desvistiendo, me desabotone la camisa, para dejarla a la mesa a mi lado, mientras hacía lo mismo con el short, y las zapatillas que guarde en mi bolso. Me quede en bañador, observando como desde niños, mujeres y sobretodo varones me veían y no quitaban la mirada de mi cuerpo, por poco y me sentía acosada.

Reí levemente, cuando escuche aquello "Pecosa", podría reconocer esa voz y sobre nombre donde fuera, ¿Acaso era tan díficil decirme "lucifer"?, suspiré mientras me ponía de pie y volteaba a ver el suso dicho con una sonrisa, -No te atrevas a venir aquí sin un trago dado.-Dije guiñendo el ojo, teníamos varios meses de amistad, pero en poco tiempos nos habíamos vuelto los mejores amigos.

Mirame, se que quieres.:

por Invitado Sáb Jul 07, 2012 4:11 pm

Sonreí al notar que me reconoce, y tiene esa actitud tan suya pero que para nada se puede fastidiar ya que es totalmente encantadora; sera el efecto porque tiene esa apariencia tan angelical y que esta tan lejana a lo que realmente es "estoy seguro de que en una rubia o morena seria algo totalmente diferente". Me levanto de donde estoy y me acerco a la barra para que me den otro trago de la casa, que tiene un color rojizo muy natural pero que al beber no es para nada sano.

Avanzo hasta la chica y me siento en la silla de su lado tras entregarle el vaso con el contenido. Alzo mi propio trago en señal de salud y bebo un sorbo acomodandome ahi.

-Podria decir, que hace una chica como tu en un lugar como este o podria simplemente decir hola. Pero dado que la segunda es muy aburrida me quedo con la primera-

Dije y me acomode mejor, sentandome de forma que mi cuerpo apunte a ella, para mirarla directo a los ojos y no verme mal educado pareciendo que la ignoro.

por Invitado Sáb Jul 07, 2012 7:15 pm

Vi que se encaminaba hacía el lugar donde estaba, estaba seguro de que no iría hasta allá, por ende, me senté en el lugar respectivo donde mi cuerpo anteriormente reposaba con comodidad. Pude sentir el aroma de Dado cerca, a tal punto que supe en el momento que se acerco a mi, ¿Era eso o el olor alcohol que emanaba de el por las bebidas que sostenían sus manos?, reí, que loco. Dejo mi bebida en la mesilla mientras la atajaba con mi mano derecha, subió la bebida en forma de brindis, -Por nosotros, los sexys.-Dije mientras bajaba el trago, que iba en dirección mis labios, calle saboreo, casa higado dañado. Así fue como mis labios conocieron el sabor de aquel licor tan divino, que volvía a caer en la tentasión de la droga hecha liquida. Termine de saborearlo y aleje el baso de mis labios, relamiendo estos sacando duras a penas la punta de mi lengua rosa.

-¿Tu no cambias eh?.-Dije mientras le miraba, este, posaba su atencióne en mi, -Vine a saborear la noche de un viernes.-Dije mientras le miraba fijamente, -¿A que vino usted Dado?.-Dije viendolo con interes, algo de curiosidad, quería sabor o obtener información del ¿Porque? estaba aquí, conocía su mentalidad, detestaba los juegos de niño en la playa y ese tipo de cosas.

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